Es un tipo de cáncer que se origina en los pulmones. El principal factor de riesgo para desarrollarlo es el consumo de tabaco en cualquiera de sus formas. Cerca del 85% de los casos de cáncer de pulmón se asocian al consumo de tabaco.
Sin embargo, también existen otros factores importantes como la exposición a los humos de la leña u otros combustibles, así como ciertas enfermedades como la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC).
Por lo general, el cáncer de pulmón se detecta en etapas avanzadas. En México, el 90% de los diagnósticos de cáncer de pulmón se realizan en etapas avanzadas de la enfermedad, lo que conlleva un mal pronóstico. Por esta razón, es importante detectarlo en etapas tempranas o localizadas.
Los síntomas pueden confundirse con otras enfermedades pulmonares, lo que a veces retrasa el diagnóstico si no se evalúan adecuadamente. Los síntomas más frecuentes son la tos persistente, el dolor en el pecho, la falta de aire y la pérdida de peso.
Toma el control de tu salud y agenda una cita hoy mismo. Nuestro equipo está listo para brindarte una atención médica personalizada y de calidad.
*Campos obligatorios
Aviso de privacidad
Si tú o un ser querido han sido diagnosticados con cáncer de pulmón o si estás buscando respuestas debido a síntomas que puedan indicar la posibilidad de tener cáncer de pulmón, aprender sobre la enfermedad puede ayudarte a sentirte mejor preparado antes de hablar con un médico. Podrás conocer más sobre la afección, las opciones de detección y los tratamientos disponibles en caso de que tus sospechas se confirmen.
Es común que el cáncer de pulmón se diagnostique en etapas avanzadas, lo que significa que casi siempre se presentan síntomas asociados a esta enfermedad.
Por lo tanto, es muy importante realizar un programa de detección individualizado si existen factores de riesgo, para poder diagnosticarlo en una etapa temprana o localizada. Los síntomas del cáncer de pulmón que deben alertarte y llevar a una evaluación médica son:
1 Tos persistente, que dura más de 1 mes.
2 Pérdida de peso inexplicada, generalmente acompañada de tos.
3 Falta de aire progresiva.
4 Expectoración de flemas con presencia de sangre.
5 Dolor en el pecho.
6 Haber sido diagnosticado con derrame pleural, generalmente en un solo lado.
7 Haber recibido tratamiento para la neumonía sin mejoría después de tomar antibióticos.
© FUNDACIÓN MAYO PARA LA EDUCACIÓN E INVESTIGACIÓN MÉDICA. TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS
Es importante tener en cuenta que estos síntomas pueden estar relacionados con otras enfermedades y no necesariamente con el cáncer. Por lo tanto, es imprescindible que sean evaluados por un especialista médico. Si eres fumador o tienes otra enfermedad pulmonar crónica, es aún más importante que no ignores estos síntomas.
El riesgo de desarrollar cáncer de pulmón depende principalmente de la exposición al humo del tabaco y otros combustibles, incluyendo el humo de leña (lo cual es particularmente relevante en México). Los factores de riesgo incluyen:
1 Consumo de tabaco: es el principal factor de riesgo, y este riesgo aumenta con la cantidad de cigarrillos consumidos y la duración del hábito.
2 Exposición a humos de otros combustibles.
3 Enfermedades pulmonares crónicas, especialmente la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) y la fibrosis pulmonar.
4 Antecedentes de infección por tuberculosis.
5 Exposición al asbesto, presente en láminas y tinacos.
Si hay sospecha de cáncer de pulmón, el especialista debe evaluar la ubicación dentro de los pulmones para determinar la mejor forma de realizar una biopsia (extracción de una muestra del pulmón para su análisis microscópico).
Normalmente, existen dos métodos para realizar una biopsia. Uno de ellos es una punción con una aguja gruesa, bajo anestesia, guiada por una tomografía computarizada u otro estudio de imagen. El otro método es una broncoscopia, que se realiza bajo anestesia, introduciendo una cámara en los pulmones para obtener la muestra del tumor.
Una vez que se realiza el diagnóstico de cáncer, se lleva a cabo la estadificación, que consiste en una tomografía computarizada o una tomografía por emisión de positrones para determinar la extensión de la enfermedad y la presencia de metástasis.
Para tomar una decisión sobre el tratamiento, es importante conocer los pros y los contras de cada opción, así como los posibles efectos secundarios y la eficacia del tratamiento. Antes de ello, se debe evaluar la extensión de la enfermedad y, en ocasiones, realizar pruebas genéticas en sangre o en el tumor obtenido mediante biopsia para determinar la mejor estrategia de tratamiento.
De acuerdo con la extensión y los resultados de las pruebas genéticas, estos son algunos de los métodos que se utilizan con frecuencia:
1 Cirugía inicial
Este tipo de tratamiento se selecciona cuando el tumor está en etapa localizada (lo cual ocurre solo en el 5-10% de los casos). El objetivo es extirpar todo el tejido maligno. Habitualmente, después de la cirugía, los pacientes requieren tratamiento con quimioterapia y, en algunos casos, terapia dirigida contra el tumor (inmunoterapia o terapia específica).
2 Quimioterapia con o sin inmunoterapia antes de la cirugía
Se utiliza cuando la cirugía no es posible desde el principio, ya sea porque el tumor es demasiado grande o porque afecta estructuras importantes que no pueden ser removidas. El objetivo es reducir el tamaño del tumor para hacer posible la cirugía.
3 Radioterapia
Se emplea cuando la cirugía no es una opción viable debido a las condiciones del tumor o del paciente. Habitualmente, se combina con quimioterapia e inmunoterapia. También puede utilizarse en casos de metástasis.
4 Tratamiento de la enfermedad avanzada (metástasis)
El tratamiento depende de los resultados de las pruebas genéticas realizadas en el tumor o en la sangre. Las opciones pueden incluir quimioterapia, quimioterapia combinada con inmunoterapia, inmunoterapia sola o terapia específica.
Cuando hay un historial de consumo alto de tabaco, se recomienda realizar una detección intencionada del cáncer de pulmón.
Se considera consumo alto de tabaco a aquellos individuos que han fumado más de 20 paquetes al año (calculado multiplicando el número de cigarrillos por día por el número de años de consumo). El riesgo de desarrollar cáncer de pulmón permanece alto incluso si se ha dejado de fumar, y puede mantenerse elevado durante más de 15 años. Si cumples con estos requisitos, deberías buscar atención con un especialista.
La detección se realiza mediante una tomografía computarizada de baja dosis, que se lleva a cabo de la misma manera que una tomografía convencional. Si en los resultados no se detecta ningún tumor, aún se recomienda continuar realizando estas tomografías con base en la evaluación del especialista.
Lo más importante es dejar de fumar, ya que esta acción reduce el riesgo de desarrollar cáncer de pulmón en el futuro. Puedes tomar medidas para reducir el riesgo de cáncer de pulmón y otras enfermedades al implementar los siguientes cambios en tu vida diaria:
1 Consumir frutas, verduras y cereales integrales
Estos alimentos contienen vitaminas, minerales, fibra y antioxidantes, que contribuyen a la prevención del cáncer.
2 Realizar ejercicio físico regularmente
Se recomienda hacer al menos 30 minutos de ejercicio al día. Si has estado inactivo, es aconsejable comenzar lentamente e incrementar gradualmente el ritmo hasta alcanzar los 30 minutos.
3 Mantener un peso saludable
La combinación de una alimentación saludable y actividad física diaria es la clave para mantener un peso adecuado. Intenta reducir el tamaño de las porciones y aumentar gradualmente la cantidad de ejercicio que realizas para controlar tu peso.
En el Centro Oncológico Internacional (COI), somos reconocidos como líderes en el tratamiento del cáncer de pulmón en México. A continuación, algunas razones por las cuales deberías considerarnos:
Cuidado cercano y de vanguardia de un equipo de expertos
Contamos con un equipo de más de 35 médicos especializados en cáncer, incluyendo cirugía de tórax, radiooncología, quimioterapia, patología y manejo de síntomas. Nuestros profesionales son reconocidos a nivel nacional e internacional en sus respectivas áreas.
Tratamiento personalizado
En COI, utilizamos pruebas genéticas de última generación y otras pruebas para identificar las características únicas del cáncer y predecir qué tratamientos serán más eficaces para cada paciente. Esto nos permite ofrecer un enfoque individualizado y adaptado a necesidades específicas.
Radioterapia precisa y eficaz
Nuestro centro cuenta con tecnología avanzada que nos permite administrar radiación directamente al tumor, utilizando los métodos más precisos disponibles. De esta manera, minimizamos la exposición a la radiación del tejido sano circundante, maximizando los resultados terapéuticos.
Pruebas moleculares innovadoras
Realizamos pruebas moleculares para buscar o analizar la expresión de determinados genes que son relevantes para la elección de un tratamiento personalizado. Estas pruebas nos brindan información adicional para tomar decisiones más precisas y efectivas.
Terapias de bienestar
Comprendemos que el tratamiento del cáncer de pulmón puede generar estrés y efectos secundarios. Por eso, contamos con expertos en atención psicooncológica que te ayudarán a controlar el estrés y a lidiar con los posibles efectos secundarios. Además, nuestros profesionales en nutrición oncológica te asesorarán para lograr un bienestar integral.
Ubicaciones estratégicas
Disponemos de centros oncológicos estratégicamente ubicados en Ciudad de México, Guadalajara y Tijuana, lo que facilita la recepción de pacientes. También ofrecemos asistencia para planificar tu visita médica, brindándote comodidad y apoyo durante todo el proceso.
Y obtén más información de cómo podemos ayudarte
*Campos obligatorios
Aviso de privacidad